célula

Cómo les he comentado en múltiples ocasiones, mi objetivo con Botiquín de Lectura es que juntos entendamos nuestro cuerpo, me parece que sólo así podremos comprenderlo, hacer y dar lo mejor por él.

En todo proceso de aprendizaje hay que ir de menos a más, de lo simple a lo complejo. Es por ello que esta vez quiero hablarles de el denominador común en el ser viviente: La Célula.

¿Qué es la célula?

La célula es la unidad anatómica y funcional de los seres vivos. En el cuerpo humano existen millones de células, cada una de ellas con su propia forma y tamaño. La gran mayoría son imperceptibles para la vista.

Hay diferentes tipos de células, sin embargo, éstas son semejantes entre sí. En algunos casos son unicelulares, de forma que constituyen seres vivos en sí mismos. Mientras, en otros son grandes colonias, y se conocen como seres pluricelulares.

«Todo organismo vivo está construido de la misma manera y constituido por las mismas unidades fundamentales: las células».

Silvia Sokolovsky.

Las células se originan de otras células. Las células contienen la información hereditaria de los organismos de los cuales son parte y esta información pasa de generación en generación.

Conformación celular

Aunque es divisible en partículas subcelulares que conservan algunas de las propiedades de la unidad funcionante original, la célula representa, no obstante, una unidad mínima de actividad relativamente independiente. 

La célula está conformada por el núcleo, la membrana plasmática y el citoplasma. A fines de entender un poco esa distribución, imaginemos un huevo frito; la yema sería el núcleo, el borde de la clara, representa la membrana plasmática y la clara hace alusión a el citoplasma (zona en la que se encuentran los orgánulos). Gracias a estos orgánulos, las células pueden desempeñar las tres principales funciones por las que se consideran seres vivos: nutrición, relación y reproducción. 

Organización celular

La materia viviente representa un grado elevado de organización, conservado en una condición de estado constante y lábil, a través de un suministro continuo de energía. Al mismo tiempo, se necesita una organización compleja para conducir energía por canales útiles para el mantenimiento de la organización. Así, la energía es necesaria para el mantenimiento de la organización, y ésta es necesaria para la utilización apropiada de la energía

El adenosín trifosfato (ATP), es la moneda energética de los seres vivos. Para poder ser sintetizado, los organismos requieren oxidar los sustratos energéticos de la dieta: proteínas, grasas y carbohidratos. De allí la importancia de obtener a través de la alimentación, los nutrientes necesarios y de calidad para que la célula obtenga la energía requerida para cumplir con sus funciones.

Función de la célula

  • Diferenciación: Proceso en el que modifican su genética para desarrollar funciones muy específicas.
  • Metabolización: Transformación de sustancias, obteniendo energía y desechos que son eliminados mediante el metabolismo celular.
  • Crecimiento: el cual se produce gracias al metabolismo celular.
  • División celular: Una vez la célula crece, se multiplica produciendo células idénticas a la original. 
  • Comunicación: Responden a estímulos que se den tanto en el interior como en el exterior y se comunican entre ellas mediante hormonas, neurotransmisores, etc.
  • Evolución: Cuando una célula sufre cambios hereditarios evoluciona, ya sea negativa o positivamente en función de su adaptación en el medio. 

La sabiduría del cuerpo

Cada célula comprende el mismo lenguaje. Lo que sucede en el cerebro se refleja en las actividades perfectamente integradas de cada célula.

Muy bien lo describen Deepak Chopra y Rudolph Tanzi en su libro Supergenes:

Imagina en este momento que cada célula es tan consciente como una persona, esto degradaría el cerebro de su posición privilegiada. Tendríamos que abandonar la idea de que el pensamiento se reduce a lo estrictamente mental, y que involucra un torrente de pensamientos, imágenes y sensaciones dentro del cerebro. Pero es evidente que existe un tipo diferente de pensamiento -no verbal, sin imágenes visuales, sin voz- que en silencio sostiene a cada célula. Esta inteligencia celular ha sido llamada la sabiduría del cuerpo.

Es por ello que hago énfasis en la importancia de conocer y entender nuestro cuerpo desde lo más básico, teniendo en cuenta que las decisiones que tomemos respecto a los hábitos, los alimentos que ingerimos, la relación con nosotros mismos y nuestro entorno, hasta los pensamientos, va a repercutir y traer consecuencias en la salud. Así que, es muy simple. Vamos a conocer juntos nuestro cuerpo, pero también a tomar acciones para gozar de lo más preciado: la salud de nuestras células.

Recuerda seguirme en mis redes sociales y compartir el artículo.