Al establecer las metas, bien sea en lo personal o en lo laboral, es importante entender el qué y porqué lo queremos lograr. No es solo decir que se quiere tal cosa, es dar cada paso hacia la meta con un propósito.
Para lograr esas metas, hay que planificar rutinas, ser realistas al crearlas, tomando en cuenta nuestras necesidades, el tiempo y recursos disponibles. Esta es la forma de asegurarnos que sean sostenibles en el tiempo, así evitamos caer en frustración. De esta manera es que se forjan los hábitos.
Estas nuevas actividades de nuestro día a día tienen que ser tan dificiles que nos hagan salir de la zona de confort, pero a la vez tan fáciles que las podamos cumplir.
En el proceso de establecer nuevos hábitos vamos a estar como en una montaña rusa, no siempre vamos a amanecer con ganas de hacer ejercicios, por eso es la importancia de no esperar la «motivación», aquí lo importante es la disciplina y ser flexibles. Está permitido esos días hacer las cosas a medias, y con esto no me refiero a renunciar. Con esto me refiero a que si solo puedes entrenar 20 minutos y no los 45 de costumbre, pues entrena esos 20 minutos y dalo todo. Date permiso de fallar, pero no permitas que sea la norma, el camino continúa.
«Es mejor hacer algo, que hacer nada».
Recuerda que hay metas a corto, mediano y largo plazo; hay tareas para realizar diariamente, otras solo entre semana, algunos días de la semana, del mes, éstas te van a llevar a esas metas anuales. Estructura bien las actividades y metas.
Particularmente, soy de la vieja escuela, llevo una agenda en papel y así me organizo. Sin embargo, hoy en día la tecnológia está de nuestro lado y podemos hacer uso de ella. Existen infinidad de apps que nos pueden ayudar con calendarios, agendas, recordatorios, planners, etc para hacer de este proceso más llevadero.
Una recomendación que me ha funcionado es planificar mi día la noche anterior. Esto va desde escribir en mi agenda las cosas que tengo por hacer, dejar a la mano la ropa deportiva que me voy a colocar y si cuento con tiempo limitado, dejar algo de la comida adelantado. Así evitamos que cualquier situación nos sabotee el camino a lograr los objetivos.
Una vez organices tu rutina, a pesar de ser flexible, establece los no negociables, por ejemplo: tomar agua, aplicar protector solar, meditar, acostarse y levantarse a la misma hora, etc..por supuesto esto aplicable de forma individual.
No olvides que cada situación es particular y cada cuerpo responde de manera diferente. Sé que no es trabajo fácil, no te compares ni juzgues, cada quién tiene su ritmo, su tiempo y espacio y eso está bien. Compite contigo mismo, por tu mejor versión, por ti❤️
