Bebé recibiendo lactancia materna

La lactancia materna es la alimentación natural de los seres humanos, ideal para recién nacidos y lactantes. Contiene todos los nutrientes que el bebé necesita para un armónico crecimiento, desarrollo de su cerebro y maduración del intestino; disminuir el riesgo de sobrepeso y otras enfermedades, no solo en la infancia, sino durante toda la vida. Establece el vínculo afectivo Madre – Hijo, brinda sensación de seguridad y protege contra agentes patógenos. El mejor lugar del mundo donde debe ser colocado un bebé al nacer es sobre su madre, piel con piel, ninguna tela entre ambos, por ello debemos darle suma importancia a la hora de oro.

«La lactancia materna es el plan de salud de la naturaleza.» – Anónimo.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud, se estima que la lactancia materna podría evitar 823.000 defunciones anuales en niños menores de 5 años y 20.000 muertes de mujeres por cáncer de mama, a nivel mundial.

¿Qué es la Lactancia Materna Exclusiva?

La lactancia materna exclusiva se refiere a que el bebé recibe únicamente leche materna, no debe recibir ningún otro alimento. Las primeras cuatro a seis semanas de lactancia son extremadamente importantes para estimular la producción de leche. Cuanto más seguido se alimente al bebé, más leche producirá la madre.

La OMS y la UNICEF coinciden en que la leche materna es el único alimento que el bebé necesita hasta los 6 meses de vida. A partir de los 6 meses se debe iniciar la ablactación ó alimentación complementaria, para ello se debe consultar al pediatra sobre qué alimentos y de qué manera incorporarlos a la dieta del bebé. La lactancia materna se recomienda al menos hasta los 2 años de vida del bebé, o hasta que la mamá y el bebé lo decidan.

“La lactancia es un regalo de la madre para sí misma, para su bebé y para la Tierra.”– Pamela K. Wiggins

Etapas de la Lactancia Materna:

En este artículo de revisión, describen los tipos o las etapas de la lactancia materna. En cada una resalta una condición nutricional diferente, varían las concentraciones hormonales, inmunológicas, fisiológicas y microbianas.

Calostro

Se produce durante los 4 primeros días post parto, en poca cantidad, 2 – 20ml por toma, aproximadamente. El escaso volumen del calostro es ideal, ya que los riñones inmaduros del recién nacido no pueden manejar grandes cantidades de líquido y hace más fácil la expulsión del meconio. Sus enzimas facilitan la digestión del bebe, sus inmunoglobulinas evitan la adherencia de los patógenos. Esta leche es muy rica en anticuerpos, los cuales tienen la función de proteger de manera bacteriana y viral al bebé cuando éste se pone en contacto con el medio externo. El calostro además es alto en proteínas y bajo en grasa, basado en las necesidades del recién nacido.

Leche de Transición

Se produce entre el día 5 y 15 después del parto (el día en que comienza y termina es variable). La madre produce alrededor de 600 a 800 ml/día. En esta etapa aumenta el contenido de grasa, lactosa y vitaminas, por lo que tiene mayor valor energético. Otra característica es que en esta leche disminuye la concentración de inmunoglobulinas y de proteínas. Conforme van pasando los días, va aumentando la secreción de leche y su composición se modifica para dar lugar a la leche madura, alrededor del día 28 – 30. En esta etapa se cierran procesos de maduración inmunológica y bacteriana y comienzan los procesos de desarrollo neuronal y crecimiento corporal.

Leche Madura

Se produce después de la etapa de transición, la concentración de inmunoglobulinas y proteínas disminuye significativamente. Por su parte, los carbohidratos, la grasa y el contenido calórico aumenta. Los componentes grasos como son los ácidos grasos poliinsaturasos de cadena larga, son muy importantes durante esta etapa, ya que el AA (ácido araquidónico) y el DHA (ácido docosahexaenoico), juegan un papel importante en la maduración final de la vista, así como en el proceso final de construcción de las redes neuronales.

La Hora de Oro

El suministro de leche materna al niño durante la primera hora de vida se conoce como «inicio temprano de la lactancia materna»; así se asegura que recibe el calostro, ofreciéndole protección.

Según la OMS, el contacto directo de la piel de la madre con la del niño justo después del nacimiento ayuda a iniciar la lactancia materna temprana y aumenta la probabilidad de mantener la lactancia materna exclusiva entre el primer y cuarto mes de vida, así como la duración total de la lactancia materna. Los recién nacidos a quienes se pone en contacto directo con la piel de su madre también parecen interactuar más con ellas y llorar menos. No hay mejor lugar después del nacimiento, para un bebé, que el pecho de su madre.

Se ha demostrado que cuando se produce el apego madre – hijo esos primeros minutos, el recién nacido regula mucho mas rápido su respiración y su frecuencia cardíaca. El bebé ha permanecido 9 meses en un lugar calientito, rodeado de agua, en el que percibe los latidos del corazón de su madre, por ello es importante que esa transición sea lo menos traumática posible. Hay que tener en cuenta en los centro de salud, los beneficios de la hora de oro, la cual sólo debe ser interrumpida, si se encuentran ante una verdadera urgencia materna o neonatal.

Beneficios de la Hora de Oro

  1. Estar juntos ayuda a fortalecer el vínculo madre – hijo y permite responder a las señales de apetito inmediatamente.
  2. El bebé dormirá mejor y llorará menos.
  3. La leche materna comenzará a producirse antes.
  4. El bebé tendrá menos probabilidades de desarrollar ictericia
  5. El bebé aumentará de peso más rápido si está cerca de la madre.
  6. Las familias que practican el apego inmediato alimentan al bebé exclusivamente con leche materna y continúan con la lactancia durante más tiempo, conllevando todo esto a aprovechar los múltiples beneficios para la madre, el bebé y la familia.

Alimentación de la Madre

El bebé conoce los sabores desde que está en el útero, por medio del líquido amniótico. Después del nacimiento, esos sabores se continúan transmitiendo por medio de la leche materna. El bebé irá percibiendo diferentes sabores, dependiendo de lo que haya comido su madre.

La UNICEF recomienda que mientras la mujer esté amamantando, tenga una alimentación variada, que incluya frutas y verduras y disminuya el azúcar y la sal. De esa forma estará ayudando al bebé a disfrutar de alimentos saludables y le facilitará la aceptación de la comida cuando empiece la ablactación.

Durante la lactancia, igual que durante el embarazo, la mujer no debe tomar alcohol, fumar o consumir drogas. El consumo de refrescos, café, té, mate y chocolate, pueden afectar el sueño del bebé y dejarlo más inquieto, por lo cuál hay que tener cuidado con éstos alimentos.

La lactancia materna es una experiencia de aprendizaje tanto para la madre, su bebé y la familia; no se logra de la noche a la mañana. Se necesita tiempo, práctica, paciencia y apoyo. Es uno de los momentos más gratificantes y naturales que toda mujer experimentará a lo largo de su vida. Afortunadamente cada día hay más acceso a información sobre todos sus beneficios y técnicas, ante cualquier duda es importante consultar con el médico. Si te gustó el artículo, quieres más temas como este o tienes alguna pregunta hazmelo saber en los comentarios. Recuerda seguirme en mis redes sociales y compartir el post.